Mi gato tiene diarrea, ¿qué debo hacer?

¿Por qué mi gato no quiere comer?

Si estás aquí, es posible que tu gato haya dejado de comer y quieras saber qué puedes hacer para ayudarlo. Aquí, en el Blog de WHISKAS® te daremos esa y otra información sobre gatos para entender mejor a tu amigo peludo. 

Es normal que te sientas preocupado, sobre todo si tu gato no quiere comer ni su comida favorita. Detrás de esta situación existen muchas causas. 

Te ayudaremos a identificar y atender cada una de ellas, para que tu gatito esté sano y tú, tranquilo. 

El misterio del plato vacío: ¿por qué mi gato no quiere comer?

Los gatos son animales que tienen hábitos muy marcados y a veces un pequeño cambio puede desatar una odisea alimenticia. Pero también puede ser algo más serio. 

Te dejamos algunas de las razones más comunes por las que un gatito deja de comer: 

1. Malestares de salud

Esta es la primera y más importante razón a considerar. Si tu gato deja de comer de repente, o si la falta de apetito se prolonga, es muy importante que lo lleves al veterinario. 

Los felinos son maestros en ocultar el dolor y los problemas de salud, así que la falta de apetito puede ser el único síntoma visible. 

Algunas de las enfermedades de gatosque pueden causar problemas en el apetito son: 

• Problemas dentales: un dolor de muelas, una encía inflamada o una infección en la boca pueden hacer que comer sea muy doloroso.
• Problemas gastrointestinales: vómitos, diarrea, estreñimiento o inflamación del intestino pueden quitarle el apetito a cualquiera.
• Enfermedades renales o hepáticas: estas condiciones pueden hacer que tu gato se sienta mal en general, lo que se traduce en falta de apetito.
• Infecciones: un resfriado, una gripe felina o cualquier otra infección pueden hacer que tu gato se sienta decaído y sin ganas de comer.
• Dolor en general: artritis, lesiones o cualquier tipo de dolor pueden hacer que tu gato se sienta incómodo y evite comer.
• Estrés o ansiedad: un cambio en el hogar (una mudanza, la llegada de una nueva mascota o un nuevo miembro en la familia) pueden afectar su apetito.

Es importante que un veterinario descarte cualquier problema de salud. No intentes medicar a tu gato porque hay medicamentos que son tóxicos para él y podrías empeorar la situación.

2. ¡Exigencia felina!

Los gatos son exigentes con su comida. Su sentido del olfato es clave para el apetito, y si algo no huele bien, simplemente no lo comerán. 

De ahí la importancia de no dejar croquetas o alimento húmedo en su cuenco. Siempre es necesario que tengan comida recién servida, sobre todo cuando se trata de alimentos húmedos.

También pueden sentirse incómodos si cambiaste la marca o el tipo de comida de repente, por lo que podrían rechazarla. Los gatos necesitan transiciones lentas cuando se trata de su alimentación.

Asegúrate de que la comida no esté rancia, caducada o expuesta al aire por mucho tiempo. Los gatos son muy sensibles a esto.

Otras razones incluyen:

• Textura o sabor. Algunos gatos prefieren la comida húmeda, otros la seca, y dentro de cada categoría, tienen sus preferencias de sabor y textura. Si tu gato siempre ha comido croquetas y de repente le ofreces soufflé, podría no gustarle.
• Plato sucio. Los gatos son muy limpios. Un plato sucio o con restos de comida es un gran desmotivante para comer. 

• Ubicación del plato. Si el plato está cerca del arenero, en un lugar ruidoso o donde haya mucho movimiento como la cocina, tu gato podría sentirse incómodo y dejar de comer. 

  Coloca su plato lejos del arenero y del agua y en un lugar tranquilo en donde tu gato se sienta a gusto. 

3. El estrés y el entorno

Como mencionamos antes, el estrés es un factor importante. Los gatos son criaturas de rutina y cualquier alteración puede desequilibrarlos.

• Cambio de casa. Una mudanza es un acontecimiento que genera demasiado estrés para un gato. Es normal que, tras el cambio de hogar, tu consentido deje de comer algunos días.
• Ruidos fuertes. Si hay obras de construcción cerca de ti, fiestas o ruidos inesperados, tu gato puede sentir ansiedad y dejar de comer.
• Conflictos con otras mascotas. Si tienes varios gatos, podría haber intimidación en la hora de la comida, haciendo que uno de ellos no se sienta seguro para comer.
• Aburrimiento o falta de estimulación. Aunque no lo creas, un gato aburrido o que no tiene suficiente actividad puede mostrar cambios en su apetito.

La importancia de la hidratación y la alimentación húmeda

¿Sabías que los gatos por naturaleza obtienen gran parte de su hidratación de sus presas? Cuando solo comen croquetas, no están hidratándose de manera correcta, porque además, no toman mucha agua. 

Este hábito de los gatos es la causa principal de problemas en vías urinarias y enfermedades renales, por eso es muy importante que, además de estimularlo a tomar agua, incluyas en su dieta comida húmeda. 

En WHISKAS® contamos con una gran variedad de opciones de comida húmeda que no solo es deliciosa para ellos, sino que también les aportan la hidratación necesaria. 

Un buen alimento húmedo para gatos, puede ser la solución si tu consentido toma poca agua o si simplemente necesita un extra de hidratación. 

Además, el aroma y la textura del alimento húmedo suelen ser más atractivos para los gatos inapetentes.

Hábitos felinos: conociendo más sobre nuestros gatitos

Para entender por qué un gato deja de comer es útil conocer cómo se comportaban antes de ser domesticados.

Los gatos son cazadores por naturaleza, y su comportamiento alimenticio refleja esto:

• Comen pequeñas porciones varias veces al día, ya que cazan presas pequeñas.
• Su olfato es su principal herramienta para evaluar la comida. Si no huele bien, no la tocarán.
• Prefieren la comida a temperatura ambiente por lo que, si la sacas del refrigerador no será atractiva. Calentarla un poco (sin que esté caliente) puede realzar su aroma y hacerla más apetitosa.
• Se sienten vulnerables mientras comen, por lo que un lugar seguro y sin interrupciones es esencial para que coman.
• Desconfían de lo nuevo. Introducir un alimento nuevo de golpe puede ser un desafío.

¿Cuánto viven los gatos y cómo influye su alimentación en eso?

La esperanza de vida de un gato doméstico varía mucho, pero en promedio viven entre 12 y 18 años, y algunos llegan a los 20 o más. 

La genética, el entorno y, por supuesto, su alimentación, juegan un papel importante en cuánto viven los gatos. 

Una dieta equilibrada y adecuada a su edad y nivel de actividad es fundamental para una vida larga y saludable. 

La falta de apetito prolongada, como ya vimos, puede ser un indicio de problemas que, si no se atienden, pueden acortar su vida.

Razas de gato y sus particularidades alimenticias

Aunque la mayoría de las razas de gato tienen necesidades nutricionales similares, algunas pueden tener predisposiciones a ciertas enfermedades de gatos que influyen en su apetito o en el tipo de dieta que necesitan. 

Por ejemplo, los gatos persas, pueden tener problemas dentales debido a su estructura facial, lo que hace que la comida húmeda sea más fácil de comer. 

Los siameses, por otro lado, son conocidos por ser bastante vocales y pueden 'quejarse' si no les gusta su comida. 

Sin embargo, en general, las pautas de alimentación son universales para todas las razas de gato.

Gatitos: los más delicados

Los gatitos son especialmente vulnerables a la falta de apetito. Su sistema inmunológico aún se está desarrollando y necesitan una nutrición constante para crecer. 

Si tu gatito deja de comer, es una emergencia veterinaria ya que puede deshidratarse y desnutrirse muy rápidamente. 

Asegúrate de que tu gatito tenga acceso a comida de alta calidad, formulada específicamente para su etapa de crecimiento, y que siempre tenga agua fresca disponible.

Soluciones y alternativas a la falta de apetito de tu consentido

Una vez que hayas descartado con el veterinario que tu felino no tenga enfermedades de gato puedes probar estas estrategias:

• Ofrécele alimento húmedo. Su aroma y textura son más atractivos. Prueba diferentes sabores y texturas. En WHISKAS® contamos con una amplia gama de SOBRES®.
• Calienta su comida. La comida tibia puede liberar los aromas y hacerla más apetitosa.
• Prueba con diferentes platos. Algunos gatos prefieren platos anchos y poco profundos para que sus bigotes no toquen los bordes.
• Alimenta a tu consentido siempre a la misma hora. ¡Los gatos aman la rutina!
• Reduce su estrés. Crea un ambiente tranquilo y seguro para tu gato. Usa feromonas sintéticas si es necesario.
• Juega con él antes de comer. Un poco de ejercicio puede estimular el apetito.
• Evita obligarlo a comer. Esto puede generar aversión a la comida.
• Sé paciente. A veces, lleva tiempo que un gato vuelva a comer normalmente.

La falta de apetito en tu felino es algo que siempre debes tomar en serio, así que el primer paso es que visites al veterinario para descartar enfermedades de gatos. 

Si quieres saber más de este y otros temas felinos, explora la información sobre gatos que tenemos en el Blog de WHISKAS®.